ME DUELE ESPAÑA

Desde aquí, desde Quito, me duele España. Porque soy español. Porque acá, en Quito, en la Fundación Intiruna donde trabajo y a la que pertenezco nos duele España a la que queremos y con la que tenemos lazos entrañables.

Desde acá estoy siguiendo los acontecimientos de este 25 S. Y me duele.

Me duele que la situación haya llegado a suscitar una concentración como la de "Rodea el Congreso".
Me duele la burla oficial de la "democracia" en la que los políticos se creen los dueños del país, un país que cometió el lamentable error de elegirlos, pero, que llegados a estas alturas, les dice "váyanse todos" y como si no fuera con ellos, permanecen inmutables en sus puestos. ¡Luego dirán que la democracia es  el gobierno del pueblo!.

Me duele el retroceso de España en lo que se refiere al manejo y uso de la violencia como en los mejores tiempos del franquismo y a la que últimamente nos están acostumbrando desde Valencia hasta Madrid.

Me duele que el Presidente Rajoy, (a quien evidentemente yo no voté) y a quien,  por lo visto, le gusta mucho viajar, en estos momentos se encuentre en New York, lejos de su pueblo (si es que lo es ) junto a Obama, que será su amigo, y tratando de plantear la propuesta de que España forme parte del Consejo de Seguridad de la ONU.¿No es ironía, pretender hablar de seguridad en España desde la inseguridad con la que vive el pueblo?
Y me duele lo que todo el mundo sabemos: que los principales responsables de la crisis española son los banqueros y los políticos. Y ninguno tiene el pudor de renunciar a sus prebendas que sería un camino importante para buscar soluciones porque evidentemente no lo es la del parcheo. ¡Qué seguros están con su impunidad!

Pues sí, hoy me duele España. Opino que el pueblo, en este día, se está dignificando. Pero duele tener que admitir la vergüenza, el indecoro de una clase política impresentable que no es de en un sólo partido.

Por eso me uno al grito: ¡Que se vayan todos! ¡Dimisión!

José Luis Molina López